lunes, 6 de diciembre de 2010
November Rain
sábado, 4 de diciembre de 2010
Kurt Albert; 1954-2010
Se supone que la próxima entrada del blog iba a ser un video en Albarracín del año pasado que todavía se resiste a ser terminado. Pero hace unas horas estaba de compras por ahí y veo la Desnivel en la sección de revistas. La cojo para echarle una ojeada rápida. La foto de portada es de Kurt Albert. ¡Un mito de la escalada! ... Me quedo varios segundos mirando la portada fijamente, intentando razonar porqué han puesto debajo del nombre: 1954-2010. Eso se utiliza cuando alguien ha fallecido..., pero... me hubiera enterado antes por alguna web!! Pués no!! Se conoce que esos días no abrí ninguna página de montaña, los titulares fueron pasando y pasando, y su muerte dejó de ser noticia. ¡Así que yo me entero hoy! ¡Y ya ha pasado más de un mes!


lunes, 8 de noviembre de 2010
Pirineo aragonés II: Ordesa y Monte Perdido

Ocre, amarillo, verde: los colores del otoño en Ordesa

GR11 cruzando el boque
Seguimos el GR11 que asciende paralelo al río Arazas, con la motivación de descubrir un lugar nuevo, y la fortuna de tener una tarde agradable en lo metreológico. El sitio es una pasada. Cruzar ese bosque en otoño, con todo ese colorido, con las hayas y los abetos entremezclados en las laderas, y los rayos del sol entrando inclinados entre las hojas de los árboles, dándole una magia especial a todo, no tiene precio. Y más, después de haber estado el día anterior asqueado con la niebla. Sólo lamento una cosa... no poder parar a disfrutar de semejante espectáculo con calma y sacar la cámara de la mochila. Meto prisa a Lara para no entretenernos y conseguimos coger un ritmo bastante bueno, y miramos a uno y otro lado para empaparnos de naturaleza. Adelantamos a turistas andarines que no tienen prisa por llegar a ningún sitio concreto, aunque alguno hay que se plantea llegar al glaciar, preguntando a un montañero que baja "cuanto queda para el glaciar" (no pude evitar descojonarme por dentro). Caminamos y caminamos, haciendo alguna pequeña parada para beber y, de paso, admirar alguna de las numerosas cascadas que hay en el recorrido.

Circo de Soaso
La Cola de Caballo
El jueves 14 amanece un día perfecto. Por el tema de la nieve el Taillón queda descartado, y mirando el mapa, una buena alternativa quizá sea el pico que está frente al refugio, cosa que nos sugiere también el guarda. Salimos del refugio sin ninguna prisa y nos deleitamos con la montaña pirenaica, que tiene unas características diferentes a las que estamos acostumbrados. Aquí las dimensiones son mayores. Vamos parando a hacer fotos a charcos helados, a los picos... Yo me imagino las fuerzas que crearon estas montañas y que plegaron los materiales que las forman.
Hace frío, y por la noche lo ha hecho más (Perogrullo baja que subo yo), así que algún tramo enfangado está totalmente helado. Incluso se ven los cristales de hielo formados por capilaridad. Esto tiene un nombre, pero no consigo recordarlo, así que os pongo la foto y ya.

Llegamos al Cuello de Millaris (2457 mts), un collado desde donde se puede seguir hacia la Brecha de Rolando, bajar hacia Cotatuero o bien, nuestra opción, coger la cresta que sube hasta el Pico Tobacor (2779 mts). Nuestro camino desde el refugio hasta el collado llevaba un rumbo noroeste, y en él gira hacia el sur, por lo que hemos rodeado todo el Circo de Góriz. Es fácil imaginarse por donde bajaban los glaciares en el Cuaternario en este lugar, porque sus huellas al excavar profundamente los valles son bastante evidentes. El hielo colgado en las paredes de los tresmiles de la zona, como la Torre de Marboré, el Cilindro o Monte Perdido, y de otras cotas más bajas, incluido "nuestra" Punta Tobacor, confluiría en el Circo de Góriz, creando una lengua de hielo aún mayor, que se desplazaría lentamente hacia el Circo de Soaso, donde las paredes en artesa (verticales) y el fondo de valle plano son de libro. Entre ambos circos, además, un torrente subglaciar empezaría a labrar lo que hoy es el curso del río que forma la Cascada Cola de Caballo. Y el glaciar continuaría su camino valle abajo, modelando el valle de Ordesa a su paso, y juntándose con más lenguas glaciares, como la que bajaría del Circo de Cotatuero.

Las vistas son muy bonitas, y merecen con mucho el esfuerzo. Reponemos fuerzas con un "sopistán" y nos dedicamos a observar el paisaje, y a hacer fotos, claro. Por cierto, lo de la nieve a 2500 que nos dijo el de información el día anterior, nada de nada. Había a partir de 2700 mts y tampoco mucha, pero en algún tramo estaba algo durilla para la época del año.
Las Tres Sorores: Cilindro de Marmorés (izda), Monte Perdido y Pico de Añisclo
Taillón, Falsa Brecha, Punta Bazillac, Brecha de Rolando y El Casco
Tampoco pudimos estar todo lo que nos hubiera gustado, pues ese mismo día teníamos que bajar y llegar a Sabiñanigo, así que emprendimos la marcha hacia el reffugio para comer allí. Los dos nos resentimos de nuestras pequeñas dolencias en las rodillas, por lo que no podemos darnos mucha prisa bajando.

Cartel de antes de subir la pedrera en SoasoOscurece más y más deprisa, y apenas hemos alcanzado el bosque. Desde la parte de arriba de las clavijas, no hemos encontrado ni un alma, así que el resto del camino lo hacemos solitos, teniendo la sensación de tener que cerrar la puerta del lugar cuando salgamos. Forzamos la vista, acostumbrándola a la penumbra del bosque y de la noche, hasta el punto de intuir el relieve del camino, más que verlo, por lo que se sucede algún tropezón que otro. Al final, llega el momento de sacar la frontal, que está más oscuro que los cojones de un grillo. Este último tramo se nos hace interminable. Curvas y recurvas de pista, que intentamos recordar de nuestra subida, para hacer cábalas sobre cuanto nos queda para llegar. Y en un momento dado, escuchamos un ruido raro a nuestra espalda, nos damos la vuelta y parece como si una luz nos siguiera. Lo curioso es que a los dos nos da la sensación de que se mueve como si alguien fuese en bici. De la manera más tonta nos ponemos a pensar en las pelis de terror, en las que una pareja joven es atacada por el perturbado de turno con un hacha. Jajajaja. Así que no le quitamos ojo a la luz. Nunca se sabe (y si no se lo preguntais a Oli, que una vez, mientras dormía en su saco vio la silueta recortada de Pablo en la puerta de la cabaña del Agero, después de haber estado hablando esa noche sobre cosas por el estilo y...). Por fin llegamos al coche, y la luz y el ruido se fueron acercando hasta convertirse en el tintineo familiar de unos mosquetones chocando entre sí, colgando del arnes de una pareja de escaladores, que debían venir de la Pared del Gallinero. Así que la puerta de Ordesa la cerraron ellos.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado... por el momento.
martes, 2 de noviembre de 2010
Monte Aá


Vista hacia Rionansa y Lamasón
Al estar el día tristón, las vistas no eran una maravilla. Los nubarrones estaban anclados a Peña Sagra y ocultaban los Picos, pero hacia Lamasón se veía ya nieve en las laderas.
(1) "Árboles singulares de Cantabria", Enrique Loriente Escallada.
lunes, 25 de octubre de 2010
Pirineo aragonés I: Benasque

Ya desde el principio, me despisto con el camino y a los cinco minutos tenemos que rectificar. Nos encontramos un poco cansados y nos cuesta encontrar el ritmo, lo que se une al desánimo del tiempo. En el P´lan d´Aiguallut por eso de no conocer el terreno, vamos de derecha a izquierda y vuelta otra vez por la imposibilidad de cruzar los cursos de agua que lo surcan, que parecen más llenos por las lluvias. La niebla juguetea, y por un pequeño instante hace ademán de abrirse, lo que nos da una esperanza, pero poco después se cierra otra vez. Entramos en el Valle de L´Escaleta rearmando los hitos que encontramos para no tener problemas a la vuelta. Así perdemos más tiempo, por lo que acumulamos bastante retraso respecto al horario que deberíamos llevar, lo cual me impacienta un poco. En una de las paradas aparecen un par de marmotas, lo que nos da un motivo para sonreir.
Un poco más adelante tengo dudas sobre el camino correcto, mapa por aquí, hasta la brújula, y nos aclaramos por fin. Continuamos. Llegando a un ibón seguimos el trazado de unos hitos que nos lleva al Coth des Aranesi (2449 mts)... nos hemos confundido otra vez... Tengo una cabreo monumental con la niebla, conmigo, con ella, con el mundo, y hasta con las marmotas. Se acabó, de este punto no subimos más, no hay tiempo, la niebla está bajando, y nos queda el tramo más complicado. Bajamos al ibón de L´Escaleta y comemos, aunque yo no mucho.
La vuelta se convierte en una pequeña tortura china. He llegado al agotamiento mental y el físico no se hace esperar. A la vuelta soy como un fantasma que arrastra una pesada cadena. Cuando tocar bajada camino lento, pero camino. Cuando toca subir no doy cuatro pasos seguidos y me apoyo en las piedras grandes para descansar. Posiblemente al no haber dormido bien y no haber comido mucho, se le unió que me quedase frío en el ibón. ¡¡Vamos, que tenía una pájaras de tres pares!!
En el refugio cenamos bien y pasamos buena noche. El miércoles amanece lloviendo, pero en la espera para pagar al guarda acaba parando.domingo, 3 de octubre de 2010
Rutas de septiembre: Torre del Alcacero



El macizo del Cornión (Occidental)
Peña Santa de Castilla (2596 mts)
Andrés, Jaime, Lara y yo
Vega de liordes y sector del Llambriónmiércoles, 29 de septiembre de 2010
Rutas de septiembre: Peña Prieta
Mirando hacia el sureste apreciamos gran parte del recorrido que nos queda por realizar. Estamos cerca del Pico de las Tetas (2103 mts), ese que se ve desde San Glorio (1609 mts) a la izquierda. Observamos el collado Robadorio que precede a la arista de los Altares, donde existe un pequeño tramo en el que te tienes que ayudar con las manos, y en segundo plano emerge la negra cara norte de Peña Prieta, el techo de la Cordillera Cantábrica.
Los bastones son nuestras herramientas, nos ayundan en cada pequeño paso hacia adelante a remontar las pendientes que nos encontramos. Son largos y delgados apéndices de nuestra anatomía que nos convierten en seres cuadrúpedos, para así, mitigar el desgaste de nuestras piernas.
Alcanzamos la cumbre del Tresprovincias (2499 mts), cuyo nombre lo expresa todo. Allí convergen Palencia, León y Cantabria. Allí se juntas las tres para darse la mano. Inmediatamente al sur las Agujas de Cardaño se descomponen alimentando las pedreras, con el Pico de las Lomas (2457 mts) saludando la mole calcárea de su vecino el Espigüete (2450mts), mientras entre ambos aparece el Murcia (2300 mts +-), muy alejado de la tierra que le da nombre.
Nos encontramos en lo que fueran, hace milenios, los dominios de hielos perpetuos. Ríos blancos congelados que labraron aristas y excavaron circos, hoy ocupados por múltiples lagos, lagunas o pozos glaciares. La Laguna de Fuentes Carrionas, a nuestros pies, es un ejemplo de ello, teniendo en la vertiente de Cardaño a su hermano, el Pozo de Las Lomas, oculto a nuestra vista. Mientras, el Pozo Curavacas aparece a vista de prismáticos bajo la norte de la montaña del mismo nombre (2520 mts).
El Pico del Infierno es el hermano menor de Peña Prieta. Lo evitamos cruzando su ladera pedregosa por el sendero, hasta ganar la cota máxima que alcanzaremos ese día, 2536 metros de altitud. En toda la cordillera no encontraremos punto más elevado que este, ya que, los Picos de Europa,que presentan altitudes mayores, están considerados como una entidad aparte, aislada, propia, por criterios de formación geológica a pesar de estar a pocos kilómetros de distancia.
Mirando hacia el norte, el vivac del Tresprovincias es testigo del enérgico relieve de los Picos, con sus tres macizos bien diferenciados; el oriental o de Ándara (por completo en tierras cántabras), el central o de los Urrieles, y el occidental o del Cornión. Y entre ellos, abriendo dos cortes entre la caliza, los ríos Duje y Cares se abren paso hacia el Mar Cantábrico.
Desde la cumbre se ven los Puertos de Riofrío con los riachuelos, remolones, serpenteando en el fondo del valle, transportando las gélidas aguas que se escapan de los lagos de montaña colgados en las laderas. Zona donde, como en el valle vecino de Pineda, pasta el ganado vacuno en la estación estival, para retirarse antes de que lleguen las nieves.
El macizo Central difuminado por la calima: las pedreras que caen camino de la Vueltona a la izquierda, Peña Vieja (2613 mts) en el centro y la canal del Vidrio a su derecha. Mientras, al fondo, la cara sur del Picu Urriellu (2519 mts).
Desde la cumbre de Peña Prieta, asomados al abismo, nos vamos despidiendo de las pendientes escarpadas de la montaña cantábrica, de sus pequeños lagos de agua turquesa y de sus demás encantos. Descendemos hacia los Altares, pero antes de llegar nos desviamos hacia el oeste, para meternos en el Valle de Lechada, cruzar por el Boquerón de Bobias hacia la Vega del Naranco y pasar de esta a San Glorio por el Boquerón de Tarna.













